Qué ver en Bucarest
Actualizado: 21 dic 2021
Bucarest, la capital de Rumanía, no es la ciudad más impresionante de Europa, pero sí es un lugar diferente con mucho ambiente, con una gente muy amable y una historia muy interesante. Yo no iba con muchas expectativas por lo que había leído en varios blogs, pero me llevé una buena imagen de la ciudad y me gustó recorrer sus calles, plazas y avenidas. Es cierto que no encontrarás la arquitectura más impresionante del mundo, pero esa mezcla de estilos te llevará a épocas muy diferentes.
¿Cómo ir del aeropuerto de Bucarest al centro?
Autobús urbano
Esta es la opción más barata y la que recomiendo si viajas solo. La línea 783 llega hasta Piata Unirii y la línea 780, hasta Gara de Nord, la estación de tren, algo más alejada del centro.
Cuesta 3 lei (unos 0,60€) y se puede pagar en el mismo autobús con tarjeta en una máquina. Eso me gustó mucho porque así no tienes que sacar dinero o cambiar de moneda en el aeropuerto. El trayecto dura una hora, ya que hay muchas paradas. Además, el bus que cogí yo iba muy lento.
Por otro lado, la climatización en el transporte público no es el fuerte de los rumanos. Al menos en verano, no se notaba casi el aire acondicionado y me morí de calor.
Tren
No recomiendo ir en tren porque es más caro que el autobús y no te deja en el centro, solo te deja en la parada Gara de Nord. No me parece la mejor opción, pero si vas con prisa, te ahorras tiempo en el trayecto.
Uber/taxi
Si viajas con más personas, puede que te salga más a cuenta coger un Uber o taxi, ya que el gasto compartido sale bien de precio. Me comentaron, eso sí, que escogiese Uber en vez de taxi porque el precio así ya está pactado.
A continuación, mi lista de qué ver en Bucarest:
1. Palacio del Parlamento
Se trata del edificio más representativo del comunismo en todo el país, además del edificio administrativo más grande, costoso y pesado del mundo. Se hacen visitas guiadas a diario. La entrada cuesta 45 RON (9 euros) y la verdad es que merece la pena entrar para admirar la grandiosidad de este edificio, ya que contrasta mucho el exterior sobrio y sin apenas decoraciones con el interior decorado ricamente con alfombras caras, cortinas, lámparas y muebles extraordinarios.
Sin embargo, en algún momento se me hizo pesada la visita porque daban muchos datos sobre las medidas del edificio.
2. Bulevar Unirii
A Bucarest se la conoce como "el pequeño París" por sus edificios de estilo neoclásico, pero sobre todo por este bulevar, que fue construido por los comunistas para competir con los Campos Elíseos de París. Para construirlo, se demolieron 9.000 casas. El bulevar mide 3,5 km y va desde la plaza Unirii hasta el Parlamento. Desde esta plaza, se tienen unas vistas perfectas del Parlamento, sobre todo por la noche, con las fuentes iluminadas.
3. Centro histórico
El casco antiguo de Bucarest tiene mucho encanto y es una maravilla pasear por sus calles. Aquí se encuentran estilos muy diferentes: edificios neoclásicos, palacios medievales o iglesias ortodoxas como la de Stavrolopeos o Sfantul Anton. También se encuentran los restos de Curtea Veche, la primera corte real de Bucarest, o el edificio Palatul CEC. Lo mejor es darse una vuelta bien completa por el casco antiguo para no perderse ningún detalle.
4. Palatul CEC
Todo un símbolo de Bucarest, el Palatul CEC es la sede del banco más antiguo de Rumanía y fue proyectado por un arquitecto de la Escuela de Bellas Artes de París. Su arquitectura con una gran cúpula de vidrio y metal impresiona mucho. Se encuentra al final de la animada calle Victoriei, la arteria de Bucarest.
5. Pasajes
Me llamó mucho la atención la cantidad de pasajes que se pueden encontrar en la capital rumana. Puede que el más conocido sea el Pasajul Macca Vilacrosse, un pasaje abovedado precioso lleno de bares y restaurantes, un lugar ideal para tomar un café, una cerveza, o fumar shisha, ya que tiene muy buen ambiente. Un poco más adelante se encuentra el Pasajul Victoriei, de cuyo techo cuelgan decenas de paraguas de diferentes colores. Por último, está el Pasajul Englez, que no es demasiado bonito, está muy oscuro y da algo de mal rollo, pero es interesante su historia, ya que el edificio construido alrededor del pasaje era un prostíbulo, de modo que las prostitutas se exhibían a los clientes que pasaban por la calle desde las ventanas.
6. Iglesia Sfantul Anton
Ubicada en el centro histórico de Bucarest, esta iglesia es preciosa tanto por su exterior como por su interior, lleno de frescos coloridos, como la mayoría de iglesias ortodoxas.
7. Monasterio Stavrolopeos
Stavrolopeos es uno de los edificios que más me gustó de Bucarest. Se trata de un templo ortodoxo construido en 1724 en un estilo brâncovenesc (del renacimiento rumano). Es un monasterio muy pequeñito, pero impresiona sobre todo por su claustro, que tiene una belleza especial, y por su ubicación, ya que está encajonado entre edificios más modernos. Se puede entrar a la capilla, que es todavía más diminuta, pero tiene unos frescos preciosos.
8. Librería Carturesti
Gracias a Instagram, esta librería se ha convertido en un verdadero reclamo turístico, ya que Carturesti tiene un interior precioso y muy fotogénico. La mayoría de personas entran para contemplar su arquitectura llena de columnas blancas, pisos con balcón y escaleras de caracol más que para comprar libros.
9. Ateneo rumano
El Ateneo rumano es uno de los edificios más bonitos de la capital. Construido en 1888, solamente desde fuera ya es precioso, con un jardín lleno de flores justo enfrente que le da un toque especial. Sin embargo, dicen que su interior es todavía más impresionante, pero yo no pude entrar porque llegué cuando ya habían cerrado.
10. Catedral y Palacio Patriarcal
Es el templo ortodoxo más importante de Rumanía y sede del Patriarca de la Iglesia Ortodoxa Rumana. Para llegar aquí, uno debe alejarse de las calles principales y subir una pequeña colina. Ambos edificios son preciosos.
11. Parque Herastrau
El Parque Herastrau es uno de los principales puntos de encuentro de los ciudadanos de Bucarest. Ver el atardecer reflejado en su inmenso lago es muy bonito. Se trata de un buen lugar para descansar al final del día después de caminar mucho. Como dato, en el pasado su nombre era Parque de Stalin.
12. Piata Revolutieti
La Plaza de la Revolución es uno de los imprescindibles de Bucarest por su historia tan reciente. Aquí fue donde el dictador Nicolae Ceausescu dio su último discurso desde el balcón de la Sede del Partido Comunista antes de ser capturado y juzgado por las atrocidades que cometió.
13. Azoteas
Una de las mejores cosas que hacer en Bucarest por la noche es ir a sus bares con azotea para disfrutar de unas bonitas vistas de la ciudad mientras te tomas algo. Los más conocidos son Nomad Skybar y Vida Skybar.
14. Arco del Triunfo
En mi opinión, el Arco del Triunfo no es una visita imprescindible de Bucarest. Se encuentra bastante alejado del centro y no tiene mucho por ver, aunque sí se puede subir y se tienen unas vistas bonitas de la ciudad. Yo lo vi desde el autobús que me llevó del aeropuerto al centro y con eso me bastó. Su historia se remonta al siglo XVII, cuando se construyó por primera vez en madera, pero la versión actual fue construida en 1936.
15. Catedral de la Salvación del Pueblo Rumano
Cuando yo la visité, esta Catedral estaba en construcción porque la idea es ampliarla para hacerla más grande y alta. A pesar de ello, desde fuera se puede apreciar su bonita arquitectura con cúpulas doradas.
¿Dónde comer?
Los dos restaurantes más famosos de Bucarest son Hanul Manuc y Caru 'cu bere. Yo solamente probé Hanul Manuc y lo cierto es que me encantó. El trato del servicio fue estupendo, la comida muy buena y, aunque los precios no son los más baratos, tampoco son excesivos, y merece la pena por probar comida tradicional rumana y por la decoración del patio interior.
Os recomiendo probar el "bulz haidusesc", un plato hecho con polenta, huevo, queso, un embutido típico rumano y panceta.
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